El foco de atención esta semana estará en la publicación el jueves de los últimos datos de inflación al consumidor, que podrían dar a
los operadores una mayor perspectiva sobre el camino potencial de la política a seguir para la Reserva Federal. El CPI (Consumer Price Index) y el PPI (Product Price Index) de los próximos dos meses serán clave para anticipar los próximos movimientos de la política monetaria.
Se espera que el CPI de julio tenga un incremento de 3,3% anual, frente al 3,0% del mes anterior, mientras que se prevé que el Core CPI, que excluye elementos volátiles como los alimentos y la energía, frene su crecimiento bajando a un 4,7%…